El Caribe importa casi toda la energía que consume, en su mayor parte petróleo. Sobre alternativas y opciones a esa dependencia, DW habló con Christiaan Gischler Blanco, especialista del BID en energía.
DW: ¿Cuáles son los principales desafíos con los que se ve confrontado el Caribe en el abastecimiento energético?
Christiaan Gischler Blanco: El Caribe tiene tarifas de electricidad que se cuentan entre las más altas del mundo. Eso es el resultado de varios factores: el volumen de la demanda, el gran uso de combustibles fósiles como fuente primaria para la generación eléctrica y la necesidad de importar muchos de los insumos necesarios para generar esa electricidad.
Por otro lado, el Caribe está dotado de abundantes fuentes de energías renovables, tales como la solar, la eólica, la biomasa, la oceánica y la geotérmica. Por lo tanto, el desafío hoy es hallar e implementar soluciones financiera, social y ecológicamente sostenibles para la región. Esas soluciones deberían tener en cuenta: la eficiencia energética; la viabilidad técnica y financiera; el uso de combustibles de bajo impacto ambiental, tales como gas natural, etano y propano en lugar de fueloil y diésel, y un marco regulatorio apropiado para que las inversiones puedan ser realizadas. Todos esos elementos conforman lo que nosotros llamamos “energía sostenible”.
¿Cuáles son los objetivos de la Iniciativa de Seguridad Energética en el Caribe (CESI) y quién le está proporcionando los principales impulsos?
La CESI comenzó a ser más conocida como resultado de la cumbre de enero de 2015 en Washington, patrocinada por Joe Biden, el vicepresidente de Estados Unidos, con la presencia de numerosos gobernantes del Caribe. Esa conferencia sirvió de catalizador para proporcionar impulsos en el sector energético de la región. Se espera que instituciones regionales tales como CARICOM y el Caribbean Development Bank (CDB) desempeñen un importante papel en la promoción de la seguridad energética en la región a través de un apoyo a la eficiencia energética, las energías renovables y los combustibles limpios, contribuyendo así además a reducir la dependencia de combustibles líquidos fósiles. Bancos multilaterales de desarrollo, como el BID, y numerosas agencias multilaterales y bilaterales de ayuda para el desarrollo están dando ayuda y asistencia técnica a la CARICOM, el CDB y los países del Caribe a efectos de alentar el uso de las energías sostenibles y promover la implementación de políticas energéticas inteligentes.
¿Qué tipo de instrumentos ofrece la iniciativa?
Como institución líder entre los bancos multilaterales de desarrollo en las Américas, el BID está proporcionando un vasto apoyo técnico y financiero a varios países del Caribe e instituciones subrregionales (tales como CARICOM y el CDB). La asistencia técnica consiste usualmente en subvenciones para realizar evaluaciones de recursos de energía renovable y eficiencia energética, estudios para mejorar políticas y regulaciones, hojas de ruta para ayudar a los países a pasar de su situación actual a un escenario de energía sostenible. La asistencia financiera incluye créditos para los sectores público y privado en el Caribe para impulsar esas iniciativas a los niveles regional y nacional.
¿Cuál es el horizonte temporal?
El BID está cooperando en el sector energético con varios países del Caribe desde los años 1970. Ya hay países que se hallan en una fase de transición hacia una matriz energética sostenible, mientras que otros no están sino comenzando ese proceso. El compromiso del BID con esos esfuerzos ha sido una de sus prioridades durante mucho tiempo. Pero la Iniciativa de Seguridad Energética en el Caribe ha aumentado decididamente el interés internacional y la atención que la región recibe en relación con su sector energético.
¿Cómo ha sido recibida la Iniciativa en el Caribe?
La Iniciativa de Seguridad Energética en el Caribe ha sido bien recibida en la región en términos generales. El BID comprende que aún se esté debatiendo sobre las formas específicas en cuanto a la forma concreta de operar y que esas formas se estén modificando para que reflejen mejor las preferencias y prioridades del Caribe. Las organizaciones regionales caribeñas desempeñarán un muy importante papel en la implementación de las reformas de las políticas energéticas y la diversificación energética. Las instituciones bilaterales y multilaterales de desarrollo, como el BID, están en condiciones y tienen la voluntad de proporcionar ayuda técnica y financiera a los socios caribeños.
¿Qué papel desempeña el bajo precio del petróleo para el abastecimiento energético en el Caribe?
Los precios del petróleo no permanecerán bajos para siempre. El escenario más probable es que aumenten en los próximos meses. En consecuencia, varias tecnologías –tales como los aerogeneradores, los paneles solares, la geotermia y los sistemas de eficiencia energética– ya son económicamente viables o lo serán a mediano plazo. A corto y mediano plazo se darán algunas excelentes oportunidades para que gobiernos e inversionistas privados inviertan en la diversificación de la energía en el Caribe.
Fuente: DW