La producción petrolera de Rusia alcanzó en marzo un nuevo máximo desde la época de la Unión Soviética, alimentando un aumento en las exportaciones y sumando presión a la saturación global que mantiene bajos los precios del crudo.
Los grandes productores de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en el Golfo Pérsico han optado por mantener su cuota de mercado, asegurando que solo recortarán su producción para subir los precios si otros −como Rusia− hacen lo mismo también.
Funcionarios rusos dijeron que es complicado ajustar de forma significativa al alza o a la baja el bombeo por lo difícil que es el mantenimiento los pozos en el duro clima del país.
Los gigantes energéticos Gazprom y Rosneft llevaron la producción petrolera rusa a su máximo postsoviético de 10,71 millones de barriles por día (bpd) en marzo, según datos del Ministro de Energía publicados el jueves.
Esta cifra mejoró el récord de diciembre de 10,67 millones de bpd.
Los datos incluyen la producción de crudo y de gas condensado, que alcanzaron las 45,275 millones de toneladas en marzo, frente a las 40,696 millones del mes previo.
Las exportaciones totales de petróleo a través del oleoducto monopólico Transneft −que incluye algunos suministros de tránsito de países vecinos− subió un 2 por ciento, hasta los 4,37 millones de bpd, o 18,476 millones de toneladas.
Las exportaciones de crudo ruso a través de Transneft crecieron un 2 por ciento, hasta los 3,91 millones de bpd, señaló el ministerio.
El ministro de Energía ruso dijo a Reuters el mes pasado que se espera que las exportaciones de crudo suban este año y más allá, ya que las refinerías locales enviarán más cantidad, dentro de un proceso de modernización que reducirá su capacidad.
Se calcula que las exportaciones de petróleo subirán unas 3 millones de toneladas en 2015 y hasta los 280 millones de toneladas anuales en 2035, frente a los 224 millones de toneladas de 2014.
Fuente: Reuters